Estudiar el tema de Dios cuestionando todos los dogmas y los postulados teológicos es apenas lo natural en un ser humano de este siglo. No es normal llegar y tragar enteros todos los dogmas que se formaron durante dos mil años, basados en enseñanzas de hombres, sujetas a error, que le fueron añadidas a las enseñanzas de Jesús.
No es malo dar el valor de humanas a las palabras de los hombres y dar el valor de divinas a las palabras de Jesús. Es natural replantear la religión a la luz de las enseñanzas de Jesús. Cada generación lo hace, cada generación corrige los errores del pasado, hasta que llegue el día de la plenitud de la verdad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario